“Este es mi grito de batalla: Realizadores, hagan películas para la pantalla grande”, expresó Sean Baker, director de Anora, ante el público de de la 97° edición de los Premios Óscar realizada en Dolby Theatre, en Los Ángeles, Estados Unidos.
En su discurso, el director reivindicó la experiencia de asistir a la sala de cine, destacando la importancia de estos espacios, especialmente de las salas independientes, y la experiencia colectiva que en ellos se genera. Asimismo, se refirió al necesario apoyo del público y de las y los realizadores para que persista esta experiencia.
El director recordó haberse enamorado de las películas en los teatros, después de que su madre lo introdujera cuando tenía 5 años. “Ver una película en el teatro con una audiencia es una experiencia en la que podemos reír, llorar, gritar o sentirnos en un silencio devastador juntos”, explicitó.
Sean Baker recibió los premios a Mejor Director, Mejor Guion Original, Mejor Montaje y Mejor Película. Además su protagonista, Mikey Madison, también fue galardonada, con el premio a Mejor Actriz. Cabe destacar que Anora es una película independiente, realizada con un presupuesto bajo en comparación a sus contendientes en esta entrega de los premios de la academia.